e-issn 2227-6513 santiago, 166, 2025

Artículo de Investigación

El enfrentamiento al bandidismo en Guantánamo (1959-1969)

The confrontation to the banditry in Guantánamo (1959-1969)

A luta contra o banditismo em Guantánamo (1959-1969)

Ana Elia González Pelegrín*1, ORCID: https://orcid.org/0009-0005-8353-9814

Josefa Azel Jiménez2, ORCID: https://orcid.org/0000-0001-6592-6785

1 Facultad del Partido Comunista de Cuba, Guantánamo, Cuba.

2 Departamento de Historia. Universidad Central “Marta Abreu” de Las Villas, Santa Clara, Cuba.

*Autor para correspondencia: josefaa@uclv.edu.cu

RESUMEN

La investigación demostró la complejidad del enfrentamiento al bandidismo en la región de Guantánamo desde la conformación del Sistema Integral de Enfrentamiento hasta su total aniquilamiento. Se analizaron las condiciones de esta región entre 1959-1969 como uno de los escenarios de la lucha contra bandidos en Cuba. Se pretende explicar la contribución del Sistema Integral de Enfrentamiento en la derrota y aniquilamiento al bandidismo y contrarrevolución en Guantánamo. Se recurrió a los métodos teóricos como analítico-sintético, inductivo-deductivo, histórico lógico; métodos empíricos de análisis de documentos y análisis del discurso. Además de utilizar el método hermenéutico en la comprensión del enfrentamiento y aniquilamiento al bandidismo y la contrarrevolución en la bibliografía consultada. De este análisis se derivan referentes teóricos para la reconstrucción desde el punto de vista teórico de este proceso en Cuba como expresión de la lucha de clases.

Palabras clave: Revolución, contrarrevolución, bandidismo, subversión, enfrentamiento

Abstract

The research demonstrated the complexity of the fight against banditry in the Guantánamo region from the formation of the Comprehensive Confrontation System to its total annihilation. The conditions in this region between 1959 and 1969 were analyzed as one of the scenarios of the fight against banditry in Cuba. The contribution of the Comprehensive Confrontation System to the defeat and annihilation of banditry and counterrevolution in Guantánamo was explained. Theoretical methods such as analytic-synthetic, inductive-deductive, and historical-logical approaches were used, as well as empirical methods of document analysis and discourse analysis. The hermeneutic method was also used to understand the confrontation and annihilation of banditry and counterrevolution in the bibliography consulted. This analysis provides theoretical frameworks for the theoretical reconstruction of this process in Cuba as an expression of the class struggle.

Keywords: Revolution, counterrevolution, banditry, subversion, confrontation

Resumo

Esta pesquisa demonstrou a complexidade do combate ao banditismo na região de Guantánamo, desde a formação do Sistema Integral de Confronto até sua aniquilação total. As condições dessa região entre 1959 e 1969 foram analisadas como um dos cenários do combate ao banditismo em Cuba. Foi explicada a contribuição do Sistema Integral de Confronto para a derrota e aniquilação do banditismo e da contrarrevolução em Guantánamo. Foram utilizados métodos teóricos como as abordagens analítico-sintética, indutivo-dedutiva e histórico-lógica, bem como métodos empíricos de análise documental e análise do discurso. O método hermenêutico também foi utilizado para compreender o confronto e a aniquilação do banditismo e da contrarrevolução na literatura revisada. Esta análise fornece arcabouços teóricos para a reconstrução teórica desse processo em Cuba como expressão da luta de classes.

Palavras-chave: Revolução, contrarrevolução, banditismo, subversão, confronto

Recibido: 9/11/2025 Aprobado: 2/12/2025

Introducción

El decursar de la historia remite a la formación de las diferentes localidades, regiones y naciones, a un conocimiento profundo de los diferentes acontecimientos que las han conmocionado y a la vez forman parte de la historia de la humanidad como resultado de su desarrollo.

En Cuba tras el triunfo de la Revolución el primero de enero de 1959, se produjeron disímiles acciones agresivas, una de ellas fue el bandidismo. En el contexto de Guantánamo adquirió características peculiares a partir de las características físico-geográficas del teatro de operaciones militares; además de la magnitud del propio fenómeno, como por las características económicas, sociales, políticas y geográficas del territorio. De ahí, la necesidad de un acercamiento comprensivo a lo entendido por Sistema Integral de Enfrentamiento (SIE) en la derrota y aniquilamiento al bandidismo y la contrarrevolución en la región guantanamera requiere aunar varias miradas y perspectivas de interpretación de este fenómeno.

Es sustancial señalar que en esta región el enfrentamiento y aniquilamiento al bandidismo y la contrarrevolución no se comportó como en otras zonas del país, la presencia de la base naval yanqui en la bahía de Guantánamo imprimió un sello distintivo en cuanto al apoyo logístico a las bandas de alzados desde este enclave, atendiendo a los problemas de índole social y económicos presentados en esta región. Sin embargo, debido a la amplia participación popular, el papel desarrollado por las Milicias Nacionales Revolucionarias, el Batallón de Lucha Contra Bandidos (LCB) y otras estructuras creadas para el enfrentamiento y aniquilación del bandidismo fue impostergable su derrota.

Las recurrentes indagaciones en torno a la contribución del Sistema Integral de Enfrentamiento (SIE) en la derrota y aniquilamiento al bandidismo y la contrarrevolución en ámbitos tan diversos como la historia, la economía, la pedagogía, la informática, la filosofía, y otras ciencias sociales ofrece una idea de la relevancia del tema. Es preciso aclarar que, en el discurso académico actual, no en todos los ámbitos es abordado de la misma manera, ni en todos los campos del saber tiene el mismo tratamiento.

Para la elaboración del artículo, se utilizaron las fuentes de carácter general de Historia de Cuba y las de las luchas contra el bandidismo. Entre las últimas, se destacan los estudios realizados por: Sánchez, J. (2021): Conflictos en Guantánamo. De enero de 1959 a los días de Girón, Hevia & Etcheverry (2022). Herrera, J. (2006), Operación Jaula, García (2002) LCB: La tropa de Tomassevich. De igual forma, se encuentran Etcheverry & Gutiérrez (2008) Bandidismo, Derrota de la CIA en Cuba; Fajardo (1984) El enfrentamiento popular a la contrarrevolución armada en la provincia de Oriente; Suárez (1981) La lucha contra bandidos en Cuba; García (2012) Subversión Política Ideológica, Cepero (2025): La derrota del bandidismo, una página gloriosa de la defensa armada de la Revolución y otros. De igual manera, se consultaron documentos inéditos atesorados en diversas instituciones y organismos nacionales y territoriales.

En la investigación la sistematización de los referentes teóricos y la bibliografía sobre la Sistema Integral de Enfrentamiento (SIE) en la derrota y aniquilamiento al bandidismo y la contrarrevolución en Cuba en general y Guantánamo en particular, se encuentran aisladas, y en muchos de los casos se abordan aspectos específicos de esta categoría como enfrentamiento, derrota, aniquilamiento. El abordaje realizado por los autores en Cuba sobre la Sistema Integral de Enfrentamiento (SIE) en la derrota y aniquilamiento al bandidismo y la contrarrevolución tributa en gran medida a asemejarlo con la lucha contra bandidos, siendo esta parte importante pero no la única y decisiva. Estos aspectos constituyen un sesgo epistémico, en el abordaje teórico de esta temática en Cuba, lo cual quedará demostrado más adelante.

Sobre la base de las carencias detectadas, el artículo tiene como objetivo explicar la contribución del Sistema Integral de Enfrentamiento (SIE) en la derrota y aniquilamiento al bandidismo y la contrarrevolución en la región Guantánamo, a partir de las particularidades físicos geográficos como base para el desarrollo de las acciones en el teatro de operaciones militares.

Metodología

Se presenta una investigación cualitativa, cuyo estudio corresponde al nivel explicativo. Las autoras se apoyaron en el método dialéctico materialista a partir de un análisis hermenéutico de los principales textos adentrados en el estudio de Sistema Integral de Enfrentamiento (SIE) en la derrota y aniquilamiento al bandidismo y la contrarrevolución en la región Guantánamo en particular y Cuba en general.

La revisión de documentos y materiales incluyó la búsqueda en el Instituto de Historia de Cuba en el fondo 19 de Lucha Contra Bandidos; en los archivos del Ministerio del Interior (MININT) del territorio; en los fondos de la Brigada de la Frontera, donde se constataron los partes de guerra, documentos de juicios a bandidos, operaciones realizadas y disposición de las fuerzas. Asimismo, en la prensa periódica de la Biblioteca Nacional y Provincial de Guantánamo, en la obra Conflictos en Guantánamo (2021), en los textos Síntesis Histórica Municipal de Guantánamo y en Síntesis Histórica Provincial Guantánamo.

En el siglo XXI, los investigadores exponen sus principales reflexiones a partir de concebir el Sistema Integral de Enfrentamiento (SIE) para la derrota y aniquilamiento del bandidismo y la contrarrevolución. Además, incluyen la contextualizan a partir de las transformaciones sociales, culturales y económicas manifestadas en la sociedad. Dentro de estos autores se encuentran: Buch, L. & Suárez, R. (2004), Etcheverry, P. & Gutiérrez, S. (2008), García, N. (2012), Sánchez, J. (2021), Hevia, M. & Etcheverry, P. (2022), entre otros. Por tanto, se comparten sus criterios.

Este amplio análisis de documentos permitió reconstruir los escenarios del teatro de operaciones donde actuó el SIE en la región guantanamera. Además, facilitó identificar los factores y causas favorables para potenciar las acciones contrarrevolucionarias en dicha región y en contraste, los factores contribuyentes al éxito del SIE en el enfrentamiento a los bandidos y la contrarrevolución interna.

La investigación asumió la definición propuesta por las autoras al considerar el SIE: Como el conjunto de acciones militares, ideológicas, políticas, educativas y económicas bajo la conducción coordinada del Ejército Rebelde, las Milicias Nacionales Revolucionarias, los órganos de la Seguridad del Estado, la Policía Nacional Revolucionaria, la Lucha contra Bandidos (LCB) y las organizaciones de masas, contribuyeron a la derrota y aniquilamiento al bandidismo y la contrarrevolución en la región Guantánamo en particular y Cuba en general.

El método histórico-lógico empleado en la investigación permitió comprender la evolución del SIE en la derrota y aniquilamiento al bandidismo y la contrarrevolución en la región de Guantánamo y sus particularidades en el contexto cubano y a la concatenación de los hechos históricos de forma cronológica. Unido a ello el método analítico-sintético se empleó para la identificación, el análisis y la explicación de los fundamentos teóricos de la construcción teórica del Sistema Integral de Enfrentamiento (SIE), además permitió comprender la influencia del bandidismo en todas las aristas de la sociedad: políticas, económicas y sociales.

Los estudios en torno al tema dentro y fuera del país apuntan a concebir el SIE en la derrota y aniquilamiento al bandidismo y la contrarrevolución en la región Guantánamo en particular y Cuba en general como parte del proceso de construcción de la nueva sociedad y del modelo de desarrollo de un país, en donde las diferentes regiones y localidades componen la economía, la cultura y las tradiciones de lucha.

La amplia búsqueda realizada y el análisis de contenidos, análisis de textos y revisión bibliográfica: libros, artículos científicos, documentos históricos, publicaciones periódicas, semblanzas, ensayos visualizarán una definición del tema objeto de estudio en Cuba. A la vez, demostrará como las bases teóricas sobre este tema son limitadas.

También el método sistémico integrador fue utilizado en la investigación para la articulación de los principales elementos que intervinieron en el SIE y en la interrelación de los diferentes tipos de paradigmas epistemológicos. Por último, el método hermenéutico por su parte, posibilitó, a través del análisis de las fuentes consultadas, delimitar las dimensiones gnoseológicas, práctica y axiológica como las más esenciales en los marcos del presente estudio y su necesidad en el contexto actual para obtener una visión exhaustiva del SIE en la derrota y aniquilamiento al bandidismo y la contrarrevolución en la región Guantánamo en particular y Cuba en general, así como sus implicaciones en el desarrollo socioeconómico del país.

Resultados y discusión

La indagación bibliográfica y de las fuentes primarias condujeron a establecer las principales regularidades en torno al SIE en la región de Guantánamo, donde fue necesario establecer determinadas particularidades a partir de las condiciones físico-geográficas. Zona con un 75% de montañas, numerosas localidades de difícil acceso y de silencio, además de la cercanía con la Base Naval de Guantánamo (BNG). Esto obligó a establecer un diseño sui generis de las acciones que integraron a todas las fuerzas vivas de la región. Por tanto, la investigación asumió la definición del SIE propuesta por las autoras planteada anteriormente.

La construcción de la nueva sociedad integró como un bloque monolítico al pueblo en el enfrentamiento, derrota y aniquilación del bandidismo y la contrarrevolución al incorporarse desde los sectores y subsectores serranos a las acciones organizadas desde la capital del país bajo la conducción de Fidel Castro, quién concluyó estas acciones en 1970 en la antigua provincia de Oriente, precisamente en Punta de Silencio, Maisí.

A juicio de esta investigación fue importante tener en cuenta el análisis de diferentes conceptos por autores internacionales y cubanos de SIE, en función de distintos intereses económicos, políticos, sociales o culturales, quienes presentaron núcleos conceptuales para otorgarle unidad a la definición propuesta: El pueblo se incorporó al enfrentamiento de las bandas contrarrevolucionarias en todo el territorio nacional; la creación de las MNR, el LCB, los sectores y subsectores serranos, la campaña de alfabetización marcaron un punto de inflexión en la derrota y aniquilamiento al bandidismo y la contrarrevolución en la región Guantánamo en particular y Cuba en general; la política cultural como garantía en la superación de la población para enfrentar las tareas de la edificación de la nueva sociedad.

En intercambio con el pueblo guantanamero Castro (1959) expresó que la situación económica, política, social y cultural heredada del período anterior era empeorada por la irrupción constante y directa de la ideología enemiga, las acciones de la contrarrevolución interna y la escalada agresiva del Gobierno de los Estados Unidos, apoyado por la CIA y el Servicio de Inteligencia Naval (SIN).

Por esas razones, era imprescindible proveer a la dirección de las diferentes organizaciones de masas, militares, ideológicas y económicas de las herramientas teóricas y metodológicas para la comprensión cultural de las medidas necesarias a aplicar con el fin de lograr de forma satisfactoria el enfrentamiento, derrota y aniquilamiento al bandidismo y la contrarrevolución; proveer a través de la educación cultural, científica y los soportes teóricos para una comprensión holista de la realidad y su contribución al mejoramiento de la condición humana y la preservación de la vida de los campesinos y población en general en las zonas donde operaban las bandas contrarrevolucionarias; demostrar como a través del empleo de métodos subversivos y terroristas, desde el enclave marino de la BNG en su propósito de destruir la Revolución, utilizó métodos más agresivos que en otros territorios.

Para profundizar en las características del SIE en la región Guantánamo, fue necesario partir del conocimiento de las condiciones físico-geográficas, económicas, políticas y sociales de la región. Además, de la necesidad de transformar la sociedad a partir de la economía, la educación, la cultura.

Para el estudio del SIE en la región Guantánamo en Cuba en un primer momento, se tuvo en cuenta la contribución al enfrentamiento, derrota y aniquilación del bandidismo en la región Guantánamo en particular y Cuba en general en aras de lograr el desarrollo del país desde la perspectiva del pensamiento social cubano. Existe un rico arsenal de ideas referidas al enfrentamiento a todo aquello que afecte la independencia de la patria desde la acumulación de conocimientos, legados por la tradición de pensamiento del siglo XIX y enriquecidos durante todo el proceso revolucionario.

Los estudios en torno al tema dentro y fuera del país apuntan a analizar este fenómeno desde diferentes perspectivas:

Según afirmó García (2002), en LCB tropa de Tomassevich, en los años 60 estimularon la organización de una oposición cubana en el exilio para actuar como cara visible y a su vez propiciara la cobertura en las operaciones de inteligencia. Así, se desató la ofensiva propagandística en nombre de esa oposición con la creación de la emisora Radio Swan y otras publicaciones para fomentar la disidencia interna en la Isla, promover el accionar de organizaciones, bandas contrarrevolucionarias y su proceder terrorista. Entre 1960 y 1961 habían invertido casi 50 millones de dólares en esas actividades.

Las agresiones realizadas fueron diseñadas desde la BNG, incidiendo en el bandidismo como forma de lucha en contra de la Revolución para cobrar fuerzas en las montañas guantanameras. Esas bandas contrarrevolucionarias fueron apoyadas, organizadas y ejecutadas desde la BNG, por la CIA y el gobierno norteamericano, utilizaron diferentes procedimientos para suministrarles armamentos, municiones, explosivos, equipos de comunicación y logística general. En el cumplimiento de este propósito se emplearon diversas vías, aérea, marítima, el canal diplomático a través de su embajada en La Habana hasta el rompimiento de las relaciones el 3 de enero de 1961.

Como resultado de lo anterior se produjo la movilización de recursos materiales y humanos para poner fin a esta guerra. Sin embargo, esta no ha sido abordada con sistematicidad por la literatura nacional a diferencia de los estudios realizados de este fenómeno en las zonas del centro y occidente del país. De ahí, la pertinencia de la propuesta desde el sur del Oriente de Cuba.

Uno de los referentes para tener en cuenta es la tesis de doctorado en Ciencias Históricas de Noralis Palomo Díaz, titulada: Particularidades del proceso de formación del Partido Comunista en Guantánamo entre 1959-1965, donde profundiza en el papel de la unidad; en el proceso de superación ideológica y cultural para enfrentar los cambios y la edificación de la nueva sociedad y en la caracterización de la región Guantánamo en lo económico político y social.

- Factores y causas favorables para potenciar las acciones contrarrevolucionarias en la región guantanamera:

Las condiciones físico-geográficas permiten aseverar como estas montañas, se convirtieron en base de operaciones para los planes de la contrarrevolución. Esa situación geográfica con más del 75% del relieve montañoso, cuevas, cavernas, reservas de agua y alimentos, facilitó el asentamiento de las bandas.

Se coincide con lo expuesto por los investigadores Etcheverry & Gutiérrez (2009), la BNG sirvió de apoyo logístico y político moral a los enemigos del proceso revolucionario, madriguera y centro de subversión. Desde allí se estimularon las entradas y salidas ilegales del país, la organización de actividades contrarrevolucionarias (sabotajes, atentados, y la propaganda anticomunista de los sectores reaccionarios guantanameros, relacionada con salvar la libertad y la pérdida de la patria potestad.

Asimismo, se organizaron y realizaron provocaciones contra la población que llegaron a los asesinatos del pescador Rodolfo Rossell del Río y del soldado fronterizo Luís Ramírez López, lesiones a varios combatientes, disparos a las postas cubanas, el lanzamiento de objetos, la realización de actos obscenos e insultos a la parte cubana. Estos repudiables actos tenían el ánimo de provocar la reacción de los combatientes cubanos como justificación para una agresión militar a gran escala.

La cercana presencia de la BNG generó empleo a más de 50 mil trabajadores, guantanameros en su gran mayoría, con un salario oscilante entre 150 y 250 dólares quincenales.

La Base se convirtió en un gran negocio para una parte de la población de Guantánamo y Caimanera, con un comercio considerable al servicio del enclave militar. Existía una burguesía favorecida con este comercio y de manera especial con el Sistema de Francos (pase semanal a los marines yanquis, quienes podían entrar libremente a la ciudad y disfrutar de los bares, cine, teatros, prostíbulos y su comercio). Por ello, se obtenía entre 5 y 6 millones de dólares al año, beneficiándose un numeroso grupo de proxenetas, dueños de prostíbulos, garroteros y traficantes.

Por tanto, la Base convirtió a Guantánamo en un territorio de contrastes. Por una parte, los privilegiados con esta y por otra, los miles de hombres y mujeres honestos opuestos al vicio, la corrupción y la degradación moral engendradas por los prostíbulos y otras prácticas propias de aquellos años neocoloniales.

En este mismo sentido, debe tenerse en cuenta la traición de algunos cuadros en cargos del Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA) como Argimiro Fonseca y militares resentidos del Ejército Rebelde, como Tico Herrera, los hermanos Ortegas en Imías, Argeo Hernández en Baracoa y Emilio Vera en el Vivac de Guantánamo. Todos ellos resultaron oportunistas y se pasaron a las filas de la contrarrevolución.

Por último, la ignorancia, confusión, manipulación y el miedo al cambio de los sectores humildes de la población, quienes en los primeros momentos fueron arrastrados a enfrentarse a la Revolución.

Lo antes expuesto, propició que el 23 de diciembre de 1959 se produjera en la localidad de Casiseis Arriba, del término municipal de Yateras, a nombre de la Rosa Blanca el alzamiento de un pequeño grupo contrarrevolucionario dirigido por Carlos Caraballo Guzmán, El Llanero y Olegario Charlot Pileta, conocido como Pelón, individuo dedicado a criticar las leyes revolucionarias, con pésima trayectoria delictiva y criminal. Se incorporó también a este alzamiento, el excapitán del Ejército Rebelde Manuel Beatón, asesino del comandante Cristino Naranjo.

En junio de ese año, en los barrios Santa Catalina y Miguel, en la región montañosa de Sagua de Tánamo se produjeron los alzamientos de Manuel Soler y Miguel Coello. Por la zona de Baracoa (1959) tuvo lugar la primera infiltración de mercenarios yanquis y apátridas cubanos al servicio de los Estados Unidos. Sus planes fracasaron en breve tiempo como resultado de la acción rápida y eficiente de las fuerzas revolucionarias, en particular las del Ejército Rebelde comandadas por Raúl Castro Ruz y las Patrullas Campesinas.

En concordancia con lo planteado por Sánchez (2021), entre 1960-1961 las campañas contrarrevolucionarias y la labor de sus organizaciones fueron intensas. En la región guantanamera lograron numerosos adictos y de forma accidental se reunieron grupos de alzados en las zonas de Alto del Mango, Caña Brava y Arroyo Blanco. Estaban integrados por los hermanos Raymundo e Israel González Carballo y Heriberto Rodríguez Peña, conocido por Rubio Peña, hijos de pequeños agricultores, así como exsoldados del Ejército Rebelde y participantes en el alzamiento del 30 de noviembre en Baracoa.

Se incorporaron a estas bandas, los hermanos Raudel y Ramón Domínguez Durán, Conrado Gómez Cobas, de la ciudad de Guantánamo, Carlos Maldonado, antiguo capataz de las colonias cañeras del central San Antonio de Redo, Israel Moreno Melo, joven de origen campesino procedente de Florida, Camagüey, prófugo de esta zona por haber cometido sabotajes. Dichos bandidos contaron con el apoyo de familiares y amistades en los barrios rurales de Yateras, Baracoa, Yambeque, Maisí y otras zonas montañosas de la región. Creyeron ver en ellos, la única fuerza capaz y en disposición de llevar a cabo ataques contra el poder revolucionario.

En las regiones de Guantánamo y Baracoa, los miembros de las diferentes bandas a pesar de contar con la BNG como elemento aglutinador de sus fuerzas se mantuvieron fraccionados, al tiempo que fueron objeto de disputas por el poder y la dirección. Estas razones resultaron causales del debilitamiento de su base social e incluso de aquellos elementos más comprometidos de la clase media.

No obstante, entre las acciones más importantes y de carácter masivo desarrolladas en el territorio, se encuentran los alzamientos de Imías en septiembre de 1960 y Monte Ruz en febrero de 1961. En esta última localidad, se repitió una acción similar en 1963.

El 30 de septiembre de 1960 se produjo en Imías, en la costa sur de Baracoa, un alzamiento de gran proporción, organizado y dirigido por antiguos oficiales del Ejército Rebelde, funcionarios civiles y contrarrevolucionarios de las regiones de Baracoa y Guantánamo. Dirigidos por José Arcos Fernández, Pepín, quien mantenía relaciones con el SIN en el enclave marino y con los antiguos caciques políticos de la jurisdicción. Desataron una fuerte campaña anticomunista; utilizaron el engaño y la falsedad para arrastrar a un numeroso grupo de campesinos y trabajadores en la revuelta contrarrevolucionaria iniciada.

El levantamiento tenía el propósito de hacer creer a la población de estas montañas las diferencias entre Fidel y Raúl, las que llevarían a un enfrentamiento. Razones consideradas atrayentes para un elevado número de campesinos en su mayoría confundidos, analfabetos y semianalfabetos, quienes siguieron el curso de la movilización indicada por los hermanos Ortega. Las fuerzas del SIE actuaron de inmediato en su búsqueda y persecución hasta la captura del último bandido, campesino, o poblador implicado.

En cumplimiento con la política humanista de la Revolución, más de 150 campesinos implicados en las acciones contrarrevolucionarias fueron enviados a escuelas de instrucción y preparación revolucionaria. Los miembros del Ejército Rebelde atendieron a sus familiares y fincas hasta la culminación de los estudios; al graduarse recibieron un diploma de reconocimiento y un estipendio. Los principales autores de los actos bandidezcos recibieron el castigo de las leyes revolucionarias y otros se refugiaron en el enclave marino yanqui.

El alzamiento de Monte Ruz, es otro ejemplo de la actuación contrarrevolucionaria interna vinculada a la CIA a través del SIN de la BNG. El plan se efectuaría en la primera quincena de febrero de 1961, estaban implicados militares activos, funcionarios, civiles y elementos contrarrevolucionarios del territorio, encabezados por el teniente del Ejército Rebelde Emilio Vera, jefe del vivac de Guantánamo y por el capitán Argimiro Fonseca. Es considerado como el alzamiento de mayor relevancia por su estrecho vínculo y orientación de la CIA, así como por la envergadura de los propósitos: tomar la ciudad de Guantánamo y acabar con la máxima dirección revolucionaria. Sin embargo, la participación popular y la efectividad del SIE impidieron su ejecución.

En esta guerra sucia, como planteara Diez (2014), impuesta por los Estados Unidos entre 1959 y 1965, actuaron en toda la región una veintena de bandas. Se produjeron numerosas infiltraciones, desembarcos por ambas costas y acciones de vandalismo contra la población campesina indefensa. Como consecuencia de su accionar contrarrevolucionario y sanguinario, desataron su crueldad en los establecimientos estatales, tiendas, puestos de la policía, locales del INRA y otros, en donde perdieron la vida personas indefensas y muchas otras quedaron incapacitadas.

Todos los alzamientos en la década del 60 en la región de Guantánamo-Baracoa se realizaron bajo la dirección de la jefatura de la BNG. Allí recibieron también refugio los conjurados como es el caso de la banda de Yarey , nativo de la zona, conocedor de cada trillo, cueva o escondite de los campesinos que en muchos de los casos eran de su propia familia y los atrajo a su proceder contrarrevolucionario. Constituye una prueba más de la intervención yanqui desde el enclave militar contra el proceso revolucionario cubano.

El enfrentamiento a la contrarrevolución y al bandidismo en Guantánamo resultó muy complejo desde los primeros momentos. No obstante, la acertada conducción de las fuerzas tácticas de combate en este oriental territorio por el entonces capitán Joaquín Méndez Cominches fue una demostración de radicalización del proceso revolucionario y de la consolidación del SIE al bandidismo y la contrarrevolución. A la vez, contribuyó a la forja de la unidad del pueblo en torno a sus principales líderes, a la causa socialista y al sistema político cubano en formación.

Al mismo tiempo, se asumían las estrategias y tácticas convergentes en el actuar para coronar la victoria: un ejército armado capacitado para la defensa territorial en las más complejas situaciones. En tal sentido, estuvieron las maniobras destinadas a desarrollar la capacidad movilizativa del pueblo a través de su incorporación a las organizaciones revolucionarias, surgidas al calor de su triunfo, en consecuencias con las demandas del momento histórico.

Lo anteriormente planteado fue posible por la estrategia unitaria diseñada por Fidel Castro Ruz (1965), artífice de las transformaciones revolucionarias en curso, estratega político militar y principal discípulo de José Martí, quien estaba convencido de:

… el éxito de toda Revolución, como de toda guerra depende, fundamentalmente, de la estrategia que se adopte, una estrategia revolucionaria es siempre más complicada que una estrategia de guerra, no se estudia en ninguna academia y los militares de profesión con sus rigurosos esquemas mentales suelen ser los menos indicados para concebirla. (Castro, 1965, p. 1).

Lo anterior impuso al naciente Estado la necesidad de crear una fuerza armada disciplinada y con una mayor capacidad combativa que las ya existentes MNR o MS. Se crearon los sectores y sub-sectores serranos, las compañías de LCB, el batallón y la Brigada de la Frontera ante la inminente necesidad de custodiar el perímetro fronterizo, extensa área facilitadora de la entrada y salida de las fuerzas enemigas desde la BNG. Durante la conformación de esas estructuras militares, se fortaleció la preparación cultural e ideológica.

En Guantánamo las fuerzas integrantes del SIE asumieron con responsabilidad y prontitud cada una de las medidas e indicaciones del estado mayor y en particular, las de Fidel Castro.

Sánchez, J. (2021) explicó como los antiguos Escuadrones de Guantánamo y Baracoa, se transformaron en Escuadrones de la Policía Rural Revolucionaria, bajo el mando de los capitanes Reinaldo Rodríguez López y Carlos Lahite Lahera, respectivamente. A partir del 7 de enero de 1961, se desempeñó como jefe de la plaza de Guantánamo, el comandante del Ejército Rebelde Demetrio Montseny Vaca (Villa) junto a Rafael Lozada Pardo por la Policía Nacional Revolucionaria (PNR). En Baracoa, Argeo Hernández Durad y Manolín Aguirre, posteriormente reemplazado por Pedro Matute Guilarte, todos designados por el Movimiento 26 de Julio para ocupar estas responsabilidades.

Los oficiales tuvieron el encargo de aplicar las orientaciones recibidas por la dirección del país: cortar todo tipo de relación con la base naval, organizar y dirigir las operaciones de persecución y captura de los bandidos en el territorio. Esto permitió el triunfo en breve espacio de tiempo y con el menor costo posible de recursos humanos y materiales, pues tuvo en cuenta las experiencias martianas de guerra breve y necesaria. Sus resultados fueron reconocidos por el Comandante en Jefe Fidel Castro, el 26 de julio de 1965 cuando señaló:

“El imperialismo recibió una lección inolvidable, el imperialismo recibió una lección no menos importante que la que recibió en Playa Girón, el imperialismo aprendió que los guerrilleros contrarrevolucionarios no pueden prosperar (...) la lucha guerrillera es un arma formidable, pero como arma revolucionaria...” (Castro, 1965, p. 1).

Los bandidos nunca lograron controlar un pueblo, una región, ni siquiera un objetivo importante; tampoco pudieron aniquilar una pequeña unidad revolucionaria, una compañía ni siquiera un pelotón. Por tanto, el poderío de ellos o el resultado de sus acciones no fueron elementos condicionantes para ejecutar cambios estratégicos en la concepción de la lucha, ni obligaron al mando revolucionario a emplear un mayor o menor volumen de fuerzas.

La geografía guantanamera favoreció el fomento y desarrollo del bandidismo. Sin embargo, los campesinos de esas mismas zonas intrincadas contribuyeron de manera decisiva a su derrota. al perfeccionamiento de la táctica de enfrentamiento basada en la guerra de posiciones, en la utilización de los cercos hasta peinar al último bandido. Integrados a las Milicias Serranas, las cuales se constituyeron en baluartes de las acciones desarrolladas, se convirtieron en la retaguardia segura del Ejército Rebelde como prácticos en las zonas de operaciones militares, en la custodia de las costas, montañas, tiendas del pueblo, de la población campesina y los objetivos económicos en la demarcación donde operaban.

La derrota del bandidismo en el territorio nacional en general y guantanamero en forma particular demostró a la reacción la imposibilidad de obtener la victoria en una guerra de guerrillas contra un pueblo armado, organizado y protagonista de una Revolución auténtica.

Se adoptaron un conjunto de medidas, entre estas se destacan: La estrecha unidad revolucionaria y el apoyo de las organizaciones políticas y de masas; la vigilancia revolucionaria, patrullaban los objetivos económicos y sociales en las ciudades y poblados para evitar los sabotajes; la atención a las familias de los movilizados y daban continuidad a las diversas tareas económicas y sociales.

En la erradicación de las bandas armadas fue determinante el apoyo del pueblo, la Policía Nacional Revolucionaria, las Tropas Serranas, las Tropas Guarda-fronteras, los batallones de LCB y los miembros del Ministerio del Interior debido a la estrecha unión prevaleciente con el único fin de cumplir el objetivo fundamental, liquidar al enemigo. La creación de los Batallones por Sectores significó un importante paso estratégico en la defensa y enfrentamiento al bandidismo, fue el resultado de utilizar como base las compañías existentes.

La estructura creada permitió consolidar el poder revolucionario mediante la atención y control directo de zonas específicas. Por tanto, la dirección militar y política estaba en manos del Ejército Rebelde. A su vez, se fue perfeccionando como parte del propio proceso de formación las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) y el MININT en el territorio.

Se comparten los criterios de Herrera (2006) cuando se refiere a la considerable importancia del principio de la territorialidad en la construcción de las Secciones de Lucha Contra Bandidos. La LCB en el territorio fue para los milicianos que la vivieron, otra guerra. Los ideales de lucha de los hombres y sus cualidades morales se convirtieron en fuerzas motrices para la acción e influyó directamente en su capacidad combativa y de resistencia a toda prueba.

Por eso, ninguna dificultad, caminar en el fango o descalzos, dormir en el monte, pasar noches sin cerrar los ojos, lidiar con los mosquitos e insectos fueron óbices para detenerlos, según sostuvo en sus testimonios el octogenario combatiente Arturo Acosta Bauta. (Comunicación personal, 7 de julio de 2020)

Guantánamo muestra peculiaridades históricas no manifestadas en ninguna otra región del país. El proceso de enfrentamiento al bandidismo se extendió algo más allá de 1965, aproximadamente hasta 1970, fecha muy diferente a lo ocurrido en otras regiones del territorio nacional. Esto no se debió a la falta de combatividad de los guantanameros, sino al intento de la contrarrevolución de aprovechar dos factores decisivos a su favor: la geografía abrupta de la provincia y la presencia de la BNG, elementos que constituirán objeto de análisis de otros estudios. Lo antes expresado, se corrobora con los criterios de los combatientes de la LCB, participantes en estas acciones:

A partir de 1965, el territorio guantanamero vivió momentos de tensiones, ciertos grupos se manifestaban inconformes con la derrota de la contrarrevolución y presionaban a la administración norteamericana por la intervención militar directa en Cuba. Se producen los desembarcos anfibios conocido por los Pintos, el alzamiento de Caujerí en marzo de 1968 y Macambo en 1969. Acontecimientos que demandaron de la atención y dirección estratégica, política militar de la revolución, en particular de Fidel y Raúl junto a las fuerzas guantanameras. (Comunicación personal de Piquera, N. & Cabrera, A. enero 2024)

El 16 de abril de 1970, dirigidos por Alpha 66 se produjo la infiltración de 13 elementos contrarrevolucionarios por Punta de Silencio en el municipio montañoso de Maisí. Su objetivo era llegar a la Sierra Maestra o a la Sierra Cristal, sobrevivir y esperar a que la población campesina de la zona y otros elementos contrarrevolucionarios se les uniera para reiniciar la lucha de los grupos alzados. Pero gracias a la acción eficaz del SIE se llevó a cabo la operación militar para sofocar la insurrección contrarrevolucionaria y destruir los planes enemigos.

Así llegó a su fin esta guerra impuesta al pueblo cubano por el imperialismo y las clases reaccionarias en los inicios de la década del 70 con los sucesos acaecidos en la Operación Punta de Silencio en el oriental municipio de Maisí, dirigida por el Comandante en Jefe Fidel Castro.

CONCLUSIONES

Se expusieron fundamentos teóricos demostrativos del papel desarrollado por el Sistema Integral de Enfrentamiento en la derrota y aniquilamiento del bandidismo y la contrarrevolución en la región de Guantánamo, como fenómeno de la realidad social. Estos habían sido insuficientemente estudiados, conceptualizados y sistematizados. El estudio de este proceso reveló relaciones significativas, cuya articulación expresa la singularidad de esta temática en el contexto cubano.

Las condiciones fisiográficas, socioeconómicas, culturales, ideológicas y políticas de Guantánamo, así como la existencia de una masa elevada de campesinos analfabetos y semianalfabetos influyeron en el surgimiento del bandidismo, pero no impidieron la implantación del Sistema Integral de Enfrentamiento para derrotar definitivamente a las bandas contrarrevolucionarias y sus bandidos en Guantánamo en los años iníciales de la Revolución.

El gobierno de los Estados Unidos apoyados por la CIA, los Servicios de Inteligencia Militar desde la Base Naval de Guantánamo, las organizaciones contrarrevolucionarias y los grupos de alzados pretendieron hacer retrotraer al pueblo guantanamero a lo que este era antes de 1959, al establecer el Programa de Acciones Encubiertas sostenido por una estrategia subversiva para derrocar la Revolución con la participación de la contrarrevolución interna.

La participación masiva del pueblo en la lucha contra el bandidismo y la contrarrevolución en defensa de sus conquistas, su rápida incorporación a las Milicias Nacionales Revolucionarias, a las Milicias Serranas, a los órganos de la Seguridad del Estado, a la Policía Nacional Revolucionaria, a los batallones de Lucha Contra Bandidos o en la cooperación con las instituciones armadas fue el factor decisivo que condujo a la rápida derrota de esos procederes nefastos a través del Sistema Integral de Enfrentamiento en Guantánamo.

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Agradecimientos

Las autoras agradecen el apoyo ofrecido por el Proyecto Lucha de Liberación Nacional, a las instituciones culturales y al Instituto de Historia de Cuba.

Declaración de conflicto de interes: Las autoras declaran no tener conflictos de interés.

Declaración de contribución de los autores/as utilizando la Taxonomía CRediT:

Amparo Alemany Martínez: investigación, análisis formal, conceptualización, redacción -borrador original.

Declaración de aprobación por el Comité de Ética: Las autoras declaran que la investigación fue aprobada por el Comité de Ética de la institución responsable, en tanto la misma implicó a seres humanos

Declaración de originalidad del manuscrito: Las autoras confirman que este texto no ha sido publicado con anterioridad, ni ha sido enviado a otra revista para su publicación.